El beneficio más importante de trabajar en equipo es el incremento de la productividad dentro de una organización. Y, precisamente, para lograr un trabajo en equipo cohesionado y eficaz, primeramente, el líder tiene que tener la condición y la claridad de que con ello obtendrá mayor productividad.
Muchos líderes en diferentes organizaciones tienen paradigmas como “divide y vencerás”; es decir, prefieren que la comunicación entre ellos sea limitada, para asegurar un control total sobre la individualidad de cada uno de sus colaboradores, pero eso provoca que entre ellos se genere mucha separación. Hay que recordar que la frase “divide y vencerás” es un paradigma que se utilizaba en la guerra para dividir al enemigo, no para dividir al amigo; Es decir, es un paradigma muy potente si estás en la guerra, pero si estás dirigiendo a un equipo de trabajo tienes que entender que la suma de las partes te asegura un mejor resultado en cuanto a lo que quieres lograr. Independientemente del estilo de liderazgo que tenga el gerente en cuestión, debe tener en la mente el sentido de la abundancia, del beneficio mutuo, del Ganar-Ganar, en la relación de trabajo con sus compañeros.
- Influir en su equipo, justamente, en esa filosofía; se trata de algo mental en un inicio. Influir en el equipo en que la suma de las partes es mayor que el todo.
- Provocar que la gente aprenda a diagnosticar a las personas con las que trabaja, de tal forma que cada uno de los miembros de un equipo sepa con claridad qué es lo que el otro necesita. Cualquier herramienta que el líder utilice para fomentar la comunicación de ida y vuelta resulta vital.
- Aprender a manejar adecuadamente los conflictos, ya que cuando tú te das permiso para conocer o entender a otra persona, te das cuenta de que tal vez ésta no necesita lo que tú quieres y eso genera conflicto. Es decir, la diferencia por definición genera malestar y la única manera de resolverlo es teniendo una técnica de manejo de conflictos para lograr equipos sinérgicos.
Asimismo, herramientas como la retroalimentación y el reconocimiento son excelentes accesorios para fomentar el trabajo en equipo. Uno de los valores organizaciones en aras de fomentarlo es retroalimentar a la gente, así como reconocer a las personas que sobresalen en este trabajo colaborativo, lo cual genera entornos de admiración por aquellos que lo hacen bien y un estímulo para aquellos que no lo están haciendo, empiecen a ejecutarlo.
Las actividades de integración también son eficaces para lograr este objetivo; y no todas necesariamente en el plano laboral.
Disciplina progresiva; Administración del desempeño del equipo
Cuando existe conflicto entre los miembros de un equipo de trabajo, la organización debe implantar alguna herramienta que le permita administrar el desempeño de su gente, lo que se conoce como disciplina progresiva. Se trata de estrategias y procesos que ayudan, precisamente, a aquellas personas que están distantes del objetivo, para que lo vayan logrando, y modifiquen poco a poco sus paradigmas, sus comportamientos y sus emociones, en todo lo que implica la colaboración.
By Raciel S.