Miguel Ángel Pla
Presidente y Director General
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El liderazgo y la felicidad son dos conceptos que parecen estar equidistantes, pero que en realidad se complementan en un 100 por ciento.

Hay que partir de la base que el liderazgo no se trata del trabajo o la carrera. Se trata de la vida. De acuerdo con Stew Friedman, fundador y director The Wharton Leadership Program, “Cada líder debe buscar su propio valor, lo que es importante para él. Aunque muchas veces, estas no sean importantes para otros”.

En la medida que se busca esa armonía entre los cuatros ámbitos de la vida, como lo son el trabajo, el hogar, la comunidad y uno mismo, es más probable encontrar la felicidad que tanto busca para su vida. Y una persona más feliz, es una persona más productiva para la sociedad y la organización en la que labora.

“La gente es feliz cuando hace lo que quiere, y cuando hace feliz a la gente que le importa”, agrega Friedman.
Así que si está pensando en fortalecer sus habilidades de liderazgo y aumentar los niveles de felicidad en su vida hay que tener en cuenta los siguientes pasos:

•Sea real: Identifique lo que es realmente importante para usted, qué se quiere articular entre el trabajo, hogar, comunidad y tiempo para usted, y cuál es la visión que tiene sobre el liderazgo en este proceso.
Hay diferentes habilidades para ser exitoso en distintos campos de la vida. Pero hay ciertos valores que son universales. Parta de ahí. Conserve en su mente que todos tienen diferentes fortalezas y debilidades, y todos son capaces de crecer en liderazgo.

•Sea completo: Se requiere saber administrar las diferentes partes de la vida. Saber dónde están los límites y cómo moverse dentro de ellos.
La clave está en enfocarse en lo que importa para la compañía y para la gente. Identificando esto, se puede encontrar pequeñas oportunidades para hacer las cosas mejor para todos.

Recuerde que mientras más liderazgo tenga una compañía, mayores posibilidades tiene de ser exitosa.
•Sea creativo: Hay que perder el miedo a experimentar constantemente. Tomar acciones que permitan cambios en los procesos, pero que no alteren la productividad son algunas opciones que contemplar. Estas deben orientarse siempre en garantizar un equilibrio entre el trabajo y la vida personal.

Este tipo de decisiones se debe tomar partiendo de conversaciones que se tenga con las personas involucradas, ya que le brindará sacar conclusiones y nuevas ideas más creativas ajustadas a la realidad de todos y no sólo de su imaginario.

•No lo haga solo: Un líder debe rodearse de gente que complemente sus habilidades y su talento. Por lo general, los líderes más asertivos tienen personas a su alrededor que los desafían.
Rodearse de personas con diferentes perspectivas, habilidades, valores experiencias a las que usted ha cosechado en la vida, le permitirá ver campos de acción no contemplados.

•Genere valor: Los valores nos hace únicos como seres humanos, y es esto lo que se debe aprovechar al momento de liderar proyectos. Los comportamientos y pensamientos cambian, pero los valores siempre permanecen.
Identifique los valores que tienen las personas que lo rodean y cómo los cambios que han sufrido en su comportamiento con el uso de la tecnología, se puede crear un punto diferencial a partir de ahí.